No me
refiero a Francia ni a Napoleón, cuando comenzó el período
conocido como los Cent-Jours, al regresar Bonaparte a París desde
su exilio en Elba, dando comienzo a la segunda restauración de
Luis XVIII como rey de Francia, poniendo fin a las Guerras
Napoleónicas y al Imperio. Me refiero a los primeros 100 días
desde que el Partido Popular volviera a acceder al Gobierno, sin
haberse ido, con la ayuda de Ciudadanos y la abstención del
Partido Socialista Obrero Español. Parece que han pasado 100 años.
Son tiempos de balance y como en la feria, cada uno lo cuenta
según le ha ido.
Dos sondeos de
La Razón y ABC, confirman que los
primeros 100 días de Ejecutivo Rajoy le disparan en intención de
voto. En ambos caen PSOE y Podemos, en relación a sus resultados
del 26-J aunque los socialistas recuperan músculo tras la dimisión
de Pedro Sánchez, y Ciudadanos se mantiene prácticamente igual.
Los éxitos para el PP, sus socios estancados; mal negocio.
El PSOE también ha hecho su
balance de los 100 días en la oposición,
que más parece en ocasiones que es aliado. Según su valoración,
más de 15 millones de personas se han beneficiado por la
«oposición útil» que han llevado a cabo y que les ha permitido
mejorar sus derechos económicos, sociales y civiles. La subida del
SMI que beneficia a más de 600.000 trabajadores. La desaparición
de la reválida que va a beneficiar a más de 2,5 millones de
estudiantes. El acuerdo sobre cláusulas suelo que permitirá que
más de 3,3 millones de hipotecados reciban lo que se les cobró de
manera injusta. La puesta en marcha del bono social que impedirá
que más de 6 millones de personas se queden sin suministro de
energía. La tramitación parlamentaria del Ingreso Mínimo que
favorecerá –si se aprueba– a más 700.000 hogares sin ingresos. Si
esto es así, cabría calcular lo que hubiese sido si hubieran
estado en el Gobierno; aunque las encuestas siguen dándole muy por
debajo de sus resultados en el 26-J.
Para la plataforma
Polétika.org, las cosas son de otra
forma. La labor del Gobierno en sus primeros 100 días es
«insuficiente» en materia de pobreza y desigualdad y considera que
es necesario que se realice un «giro inmediato» para que «se
garanticen los derechos de las personas, especialmente, las más
vulnerables», que siguen viéndose perjudicados.
El análisis de Polétika, lo desarrolla en el
documento
100 días de Gobierno: pasos positivos pero insuficientes para
luchar contra la pobreza y la desigualdad,
centrándose en 11 materias en la lucha contra la pobreza y la
desigualdad. El resultado es que en estos 100 días se podían haber
adoptado grandes medidas políticas, a la altura de los retos
nacionales e internacionales que España y el mundo afrontan y que
repercutieran en el cambio real en la vida de las personas, pero
no lo han hecho.
Pasos
insuficientes para acabar con la pobreza energética y el cambio
climático. El informe considera que el bono social aprobado no
soluciona el drama de las 5 millones de personas afectadas por la
pobreza energética. Entienden que hay que derogar el «impuesto al
sol», así como que la Ley de Cambio Climático y Transición
energética, para prescindir carbón y el petróleo en el 2050.
España es uno de los países europeos más afectados por el cambio
climático y a estas alturas, no vale cualquier ley a modo de
lavado de cara. Debe plantear un cambio real en el modelo de
producción y consumo, con reformas en sectores claves como la
energía, el transporte o la agricultura. Rajoy sigue manteniendo
la teoría de su primo el científico sobre esta materia.
El
gobierno ha ignorado la Cooperación para el desarrollo. En
conclusión, es fundamental que el Gobierno ponga en marcha las
iniciativas sobre Cooperación aprobadas por el Parlamento,
cumpliendo con los compromisos internacionales, de forma
prioritaria, aumentar, para 2017, los recursos de Ayuda Oficial al
Desarrollo (AOD), llegando como mínimo a un 0,24% Renta Nacional
Bruta (RNB) para poder alcanzar el 0,4% en 2020.
El
Gobierno también ha olvidado a las personas refugiadas. España
sólo ha acogido al 6% de los más de 17.000 refugiados que el
Gobierno se comprometió a acoger, poniendo en riesgo la vida de
miles de personas. Los principales grupos de la oposición
presentaron una Proposición No de Ley que demanda «un aumento de
los fondos en ayuda humanitaria» y un compromiso con los Derechos
Humanos en la frontera sur del país. El Gobierno no lo tiene en
cuenta como otras tantas cosas.
El
Sistema educativo sigue paralizado al no derogarse la LOMCE y no
llegar a un pacto social con la comunidad educativa y la sociedad
civil. Esta situación muestra el fracaso del Gobierno en esta
materia. En estos primeros 100 días no ha habido ningún anuncio ni
iniciativa para revertir los recortes en educación, que suman más
de 8.000 millones de euros desde 2009. Es necesario que se
incremente el presupuesto de esta partida, hasta alcanzar el 7%
del PIB, desde el 4,3% actual.
Los
avances llevados a cabo en materia de fiscalidad son muy escasos y
claramente insuficientes, por lo que el Gobierno necesita mejorar
e impulsar un plan de lucha contra el fraude, puesto que lo que
hay no es insuficiente y cada año seguimos pagando entre «800 y
1.000 euros en impuestos» por el fraude cometido. Rajoy desoye
«las iniciativas propuestas por el Parlamento para luchar contra
los paraísos fiscales»; prefiere seguir favoreciendo el fraude.
Aunque
ha habido pequeños avances en materia de igualdad de género, el
trabajo iniciado en esta legislatura necesita mejorar. Se ha
ampliado la baja de paternidad a cuatro semanas, se ha llegado al
acuerdo para un Pacto de Estado contra la Violencia de Género,
aunque sin explicar el presupuesto que se destinará para combatir
la violencia machista, después de haberse reducido un 25% entre
2010 y 2016. Para que se produzca una auténtica igualdad entre
hombres y mujeres, hay que establecer medidas de conciliación y
contra la violencia y el #terrorismomachista de forma decisiva.
En
relación con la infancia, Polétika observa que se han producido
pocos avances, dejando en el aire más palabras que medidas. El
Gobierno ha asumido diversos compromisos en sede parlamentaria, a
través de intervenciones y comparecencias, que siguen sin
cumplirse. No ha presentado, como debería, una Ley de prevención
del consumo de alcohol para menores ni un Plan de convivencia
escolar ni modificación de la Ley de familias numerosas, que son
necesarias.
En
materia de Protección social, el informe de Polétika, valora
positiva «la propuesta de establecer una renta mínima de 426 euros
para las personas sin recursos», pero lo ve insuficiente. Debe
garantizarse ingresos dignos al 22,1% de la población que en 2015
vivía en riesgo de pobreza. Es necesario blindar los Derechos
Fundamentales y sociales en la Constitución. Tanto el Gobierno
como el Parlamento necesitan implicarse más en Protección Social
con políticas para combatir la pobreza y reducir la desigualdad.
Polétika entiende que la subida del Salario
Mínimo Interprofesional debe ir acompañada de subidas progresivas
para alcanzar los 800 euros en 2018 y los 1.000 euros netos en
2020. En este sentido hay que recordar que el SMI de España es 173
euros inferior a la media de la zona euro, 8º más elevado de toda
la UE y 10º en términos de valor adquisitivo (datos
Eurostat, 2 febrero). Se necesitan
medias que garanticen salarios dignos, reduzcan las diferencias
salariales y eliminen la brecha salarial de género.
En el
área de Sanidad, Polétika denuncia que el Gobierno ha mantenido la
defensa a ultranza del modelo de exclusión sanitaria impuesto en
2012, algo que califica de decepcionante. Esta medida supuso el
retiro de 870.000 tarjetas sanitarias y desde 2014, se han
documentado 2.500 personas privadas del derecho a recibir
asistencia médica. Por esto y alguna cosa más, los últimos 100
días han sido decepcionantes.
El
análisis revela que se han olvidado cambios muy relevantes y que
se convierten en 5 retos políticos que Polétika comienza a
vigilar: Un compromiso decidido y real, con reflejo
presupuestario, por la política pública de cooperación para el
desarrollo, hasta alcanzar el 0,24% RNB. Un plan de choque contra
la evasión y elusión fiscales. Cumplir con los compromisos de
acogida de las más de 17.000 personas refugiadas. La recuperación
del sistema universal de acceso a la salud. La apertura de un
proceso de diálogo educativo para crear la Nueva Ley de Educación,
con la participación real y efectiva de toda la comunidad
educativa y la sociedad civil.
100 días de Gobierno y alguna canallada.
Las pensiones perderán 7 puntos de poder adquisitivo hasta 2020.
Las cuentas de la Seguridad Social seguirán en números rojos hasta
principios de la próxima década, lo que, de acuerdo con la reforma
introducida por el Gobierno de Rajoy, las pensiones sólo podrán
subir durante ese tiempo el mínimo previsto, el 0,25% (como ha
venido sucediendo en los últimos años). Pero en ese tiempo la
inflación seguirá subiendo, lo que supone condenar a los
pensionista a que sus ingresos pierdan poder adquisitivo. De otra
parte, la reforma laboral de Rajoy, que después de cinco años
pretende mantener, nos ha dejado «Más
pobreza y más desigualdad», junto con
más temporalidad, menos desempleados protegidos, más jornadas a
tiempo parcial, y más paro de larga duración. #vergüenzasdeEspaña
Junto
con Polétika estaremos pendientes de las políticas del Gobierno
los próximos 100 días, mientras, si puede ser, que caiga, o por el
efecto de una oposición decente o por la presión ciudadana.