Volodímir
Zelenski,
un
cómico
frente
a
Putin.
La invasión
de
Rusia,
que
ha
provocado
la
guerra
contra
Ucrania, ha
colocado
en
los
focos
escénicos
a
Zelenski.
Político,
actor,
comediante,
productor
y
licenciado
en
derecho. Nació hace 44 años en la antigua República Socialista Soviética
de
Ucrania.
Sexto
presidente
en
la
historia
de
Ucrania, cargo
que
asumió
en
mayo
del
2019
después
de
dar
el
salto
de
los
platós
a
la
actuación
política.
Le
vemos
diariamente
con
su
camiseta
caqui,
al
frente
de
un
Gobierno
que
resiste
el
acoso
militar
de
la
primera
potencia
militar
de
la
Tierra.
En
2018,
Zelenski
era
ya
una
de
las
personas
más
conocidas
de
la
cultura
popular
en
Ucrania. Ganó
las
elecciones
a
Petró
Poroshenko,
arrasando,
gracias
a
su
imagen
de
hombre
corriente
y
humilde
alimentada
por
años
de
su
popular
show
de
sátira
política
en
un
país
con
récord
de
desconfianza
en
el
Gobierno.
Sus
críticos
aseguraban
que
su
falta
de
experiencia
política
le
haría
imposible
luchar
contra
la
corrupción,
su
principal
bandera,
congelaría
las
relaciones
con
las
instituciones
internacionales
y
serviría
para
envalentonar
a
Rusia.
De
los
escenarios
y
las
cámaras
de
televisión,
a
ser
un
presidente
de
un
país
en
guerra.
Defenderemos
nuestro
Estado,
porque
nuestra
arma
es
nuestra
verdad,
nuestra
tierra,
nuestro
país,
nuestros
hijos.
"Gloria
a
Ucrania",
dice
en
las
redes
sociales.
Es
carne
de
redes,
que
conecta,
no
solo
con
la
ciudadanía
ucraniana,
sino
con
muchos
otros
en
el
ámbito
mundial.
Ha
pedido
el
apoyo
a
Europa:
Si
cae
Ucrania
el
ejército
ruso
estará
en
las fronteras
de
la
Unión
Europea.
Acusa
a
Rusia de
querer
borrar
la
historia
de
Ucrania.
Su
percepción
del
riesgo
de
invasión
parecía
variar
según
el
día.
En
diciembre,
fue
quien
hizo
saltar
las
alarmas
al
hablar
de
que
se
preparaba
un
golpe
de
Estado
que
podría
producirse
de
manera
inminente,
pero
semanas
después
era
el
que
pedía
calma
y
decía
que
no
ayudaban
los
avisos
de
EEUU
de
que
Rusia
estaba
a
punto
de
invadir
su
país.
Para
el
presidente,
hoy
los
ucranianos
son
un
símbolo,
son
invencibles.
Veremos
por
cuanto
tiempo. |